Glorieta de Colón
En una estrategia desesperada y hasta burda, desde la cúpula de la bancada de Morena en el Congreso de la Ciudad de México, que coordina Martha Ávila, sondearon a ver si los priístas los apoyan para consumar el golpe en contra del PAN.
Se trata de modificar la Ley Orgánica para quitarles en definitiva la presidencia de la Junta de Coordinación Política, con la ausencia de facto de Christian Von Roehrich, sobre quien pesa una orden de aprehensión.
Con los votos de los priístas Morena tendría los 44 necesarios (dos terceras partes) para reformar dicha Ley, que hoy establece que la presidencia de la Jucopo es rotativa, el primer año a la fuerza mayoritaria, el segundo para la siguiente, y el tercero, en esta Legislatura, para los priístas. ¿Será tanto el PRIMor del coordinador tricolor, Ernesto Alarcón, como para darse un tiro en la sien?
¿SUMA o resta?
En la medida de sus conveniencias, que no las de sus electores, los políticos se ajustan. Ahora es el caso del diputado Janecarlo Lozano, quien en 2021 hizo campaña contra la jefa de Gobierno, desde el PRD, por el que fue electo, y ahora ya hasta apoya las aspiraciones presidenciales de la jefa de Gobierno, como militante de Morena.
Lozano se adhirió a lo que llaman movimiento “SUMA Construyendo Sociedad”, que “encabeza el ex diputado de Morena, Efraín Morales Sánchez, quien también cambió de opinión radicalmente en poco tiempo, pues hace unos meses acusaba al presidente Andrés Manuel López Obrador de “absolutista y dictador de México”, y ahora apoya a la candidata oficial del primer mandatario.
En lo que no queda claro si ya es un acto anticipado de campaña, lo que tendrá que resolver el INE en su momento, ayer esta organización instaló lo que llamó su primer «Comité de la Transformación», que según ellos también pretende “preservar a la Ciudad de México como una capital vanguardista y de derechos”. A ver si no esta organización no chapulinea y termina más en RESTA que en SUMA.