Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
Desde ya, iniciará una carrera entre los brigadistas de Clara Brugada y Omar García Harfuch contra los alcaldes y probablemente el jefe de Gobierno, pues los primeros ya tapizaron la ciudad de bardas y pendones promoviéndose hacia 2024 y seguramente continuarán, mientras que las autoridades mencionadas tienen 15 días para “blanquear bardas” y quitar cualquier tipo de propaganda, pues se presume que ya es una campaña anticipada.
Esto lo determinó el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) el miércoles, cuando aprobó los “Lineamientos para garantizar la imparcialidad, neutralidad y equidad en la contienda, en el marco del proceso electoral local ordinario 2023-2024”. Aunque algo tarde, es una medida muy relevante, porque las bardas, posters y pendones en los postes de las calles utilizan el nombre o apellido de los aspirantes, lo que ya determinó el organismo como ilegal.
Este tema deberían ya estar valorándolo los equipos de campaña de Brugada y Harfuch, y acaso tomar la decisión de parar su desatada promoción política, toda vez que podrían ser sancionados por el Tribunal Electoral de la Ciudad de México (TECM), porque ya hay una determinación muy específica del IECM, cuyos lineamientos pretenden evitar que quienes pudieran ostentar una precandidatura o candidatura vulneren la equidad de la contienda, lo cual parece ya haber ocurrido.
El jefe de Gobierno, Martí Batres, ya dijo que no va a cumplir con el mandamiento del IECM, bajo el argumento de que “hay libertad de expresión”, con lo que queda en una aberrante contradicción –otra vez– respecto de su trayectoria política, pues siempre pugnó porque se respetaran las leyes electorales y los ordenamientos de sus instituciones, y ahora desacata.
Sin duda, los alcaldes de Morena no tocarán la propaganda de sus compañeros de partido, pero es muy probable que los ediles de oposición sí lancen brigadas a las calles para blanquear bardas y limpiar postes. Será una guerra de limpieza contra pintas.
“La Secretaría Ejecutiva deberá requerir a las personas titulares de las dieciséis alcaldías y, en su caso, a las autoridades del Gobierno de la Ciudad de México, para que realicen el retiro y/o blanqueamiento de toda propaganda que se encuentre colocada en vía pública, incluido el pintado de bardas, que resulte contraria a las disposiciones… particularmente de aquella que contenga el nombre, apellido, imagen o algún dato que haga identificable a una persona, sea servidora pública o no, con excepción de la propaganda relativa al Informe Anual de Labores o de Gestión”, dicen los lineamientos.
Limpien o no las autoridades, en el tema de la propaganda hay hechos consumados que probablemente violentaron la normatividad electoral, incluso con actos anticipados de campaña, que podrían devenir en procesos especiales sancionadores por parte del TECM contra Harfuch, Brugada, y otros aspirantes, incluidos los de la oposición, quienes han sido más cuidadosos.
Para darle un marco normativo más preciso, en los Lineamientos definieron así a las campañas anticipadas: “Son los actos de expresión que se realicen bajo cualquier modalidad y en cualquier momento fuera de la etapa de campañas, que contengan llamados expresos al voto en contra o a favor de una candidatura o un partido, o expresiones solicitando cualquier tipo de apoyo para contender en el proceso electoral por alguna candidatura o para un partido político.”. De acuerdo con la opinión de algunos consejeros electorales, parece evidente que han incurrido en esa conducta los aspirantes de Morena, que ya están en un franco y descarado proceso proselitista. Seguro no les van a hacer nada. Lo veremos.
FOTO: X / @JoeCast84