Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
Si los diputados de Morena en la Ciudad de México estuvieran jugando una partida de ajedrez, su adversario les haría jaque mate en unos cuantos movimientos. Su desesperación es tal ante el avance de la oposición, que enseñan las tiradas de sus siguientes turnos. Actúan de manera impulsiva, conducta que proviene desde la Coordinación del Grupo Parlamentario, a cargo de la diputada Martha Ávila.
Es en el tema del todavía diputado en funciones y coordinador de los panistas, Christian Von Roehrich, contra quien pesa una orden de aprehensión y los de Morena lo quieren ya fuera del Legislativo, aunque todavía falta para que se den los tiempos legales y ello pueda ocurrir. Al menos todavía no se le puede aplicar lo establecido en el artículo 8 del Reglamento del Congreso de la Ciudad de México, con el cual los morenistas alegan que se debe llamar ya al diputado suplente.
El párrafo tercero de dicho precepto reglamentario establece que la suplencia del diputado propietario procede cuando “no se presente a cinco días de sesiones en un mismo período, sin causa justificada o sin previa licencia del presidente de la Mesa Directiva”.
En su impulsividad, de manera equivocada, el diputado ex perredista (hoy ya en Morena) Janecarlo Lozano, dice que este artículo ya se debe aplicar, y el Congreso debe citar al diputado suplente, Federico Chávez Semerena, quien actualmente se desempeña como presidente del PAN en la Alcaldía Benito Juárez.
¿Por qué se equivoca Lozano? Porque Von Roehrich todavía no acumula las inasistencias previstas en el artículo citado. Los tiempos son así: la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México consiguió una orden de aprehensión contra el diputado panista y ex delegado en Benito Juárez el 5 de diciembre de 2022 El plan era detenerlo el martes 6 en las afueras del Congreso, para tener la foto del panista esposado. Sin embargo, desde la Fiscalía –alguno de los miles de inconformes con su titular, Ernestina Godoy– le dio el pitazo de que iban por él, y ya no acudió ese día a sesión.
El jueves 8 de diciembre se supo ya públicamente de la orden de aprehensión cuando Von Roehrich ya se había fugado. Por lo mismo, ese día no sesionó el Congreso. A la siguiente semana, hubo dos plenarias, principalmente para la aprobación del Presupuesto 2023. Es decir, el coordinador panista tuvo tres inasistencias probablemente injustificadas. El área de Servicios Parlamentarios del Congreso oficialmente sólo tiene registro de una falta. La cuenta empieza de cero en el nuevo periodo ordinario, que inicia el 1 de febrero.
Por su impulsividad desenfrenada contra la oposición en la capital, los morenistas enseñan el juego: quieren que en febrero el PAN tenga que designar un nuevo coordinador, pues hasta hoy el Grupo Parlamentario lo dirige Federico Döring, con una figura de vicecoordinador. Esto puede meter en una disputa interna a los panistas, porque el otro vicecoordinador, Ricardo Rubio, continúa con aspiraciones de encabezar a sus compañeros de bancada.
Enseñar su juego de manera tan anticipada permite a los panistas elaborar una estrategia de contraataque, en la que incluso se contempla que Von Roehrich pueda obtener un amparo para no ser detenido y continuar como legislador. Döring asevera que para proceder penalmente contra los diputados locales también se requiere el juicio de procedencia en el Congreso, pues aunque la Constitución capitalina no les da fuero en este sentido, puede alegar que la Constitución federal sí. Ora sí cabe a la perfección la frase: ¡serenos, morenos!